Como explica Christian, la administración Trump supone una montaña rusa de decisiones regulatorias que afectaron -y siguen haciéndolo- gravemente a la energía solar y al almacenamiento. Primero, se impusieron aranceles; luego, se suavizaron. Un entorno muy complejo. Pero como señala el gestor: “cuando la incertidumbre es muy alta, se podrían ofrecer algunas oportunidades de inversión bastante interesantes”.

De hecho, la visión de Christian no es pesimista. Más bien es realista: “La regulación se mueve como un péndulo”, afirma. Y, como todo péndulo, después de un golpe a un lado, suele volver al centro. 

El mensaje de fondo es claro: a medio y largo plazo, las energías renovables no solo son deseables, sino necesarias y cada vez más competitivas en costes. Los paneles solares y los sistemas de almacenamiento no solo han mejorado tecnológicamente, sino que ahora pueden competir de tú a tú con fuentes tradicionales. Me ha gustado especialmente lo que menciona sobre que “las energías renovables se están volviendo cada vez más competitivas en costes en comparación con otras fuentes y a más largo plazo tendrán una participación creciente de la combinación del mix energético global”.

El reto, sin embargo, es cómo sortear la incertidumbre a corto plazo. Y aquí entra en juego una estrategia de inversión bien pensada.
El proceso de inversión del Renewable Energy Fund de DNB Asset Management se basa en algo tan sensato como difícil de mantener en tiempos volátiles: la disciplina. Cuando aparece nueva información —por ejemplo, un cambio normativo— no se entra en pánico, sino que se ajustan los modelos y se valoran las oportunidades. Si el mercado castiga a una empresa más de lo que el evento justifica, puede ser el momento de aumentar posición. 

El área de resource efficiency es como la joya escondida del fondo. Desde bombas de calor hasta materiales aislantes, pasando por enzimas industriales, este sector reúne crecimiento y menos ruido regulatorio. Además, la lógica es irrefutable: “ahorrar una unidad de energía siempre será más barato que producir una nueva”.

El mercado, según nos cuenta Christian, podría estar pasando por alto algunas joyas del sector de energía limpia. Tras años de decepciones, la confianza ha menguado. Y, como sabemos, cuando la confianza baja, los precios también lo hacen… a veces más de lo debido.

Algunas compañías están tocando fondo en términos de beneficios, con expectativas de recuperación que aún no han sido plenamente valoradas por el mercado. Si tienes paciencia, y un perfil tolerante al riesgo, podrías estar comprando crecimiento a precio de saldo.