¿Cuál es vuestra visión sobre la bolsa española en estos meses?

No podemos obviar la situación a nivel mundial. Estamos ante una escalada de aranceles que inició la administración Trump. Y si ya de por sí es complicado calibrar lo que implica eso para crecimiento económico, el hecho de que día a día nos levantemos con noticias diferentes y el mercado no sepa más o menos calibrar que puede ser eso, pues es un escenario bastante complejo. 

En cualquier caso, la bolsa española lo ha hecho bastante bien, porque tiene dos cosas a favor desde nuestro punto de vista. Por un lado, la masa sectorial lo que más pesa son los bancos y las eléctricas, que si os fijáis al final son dos sectores que apenas son sensibles a este impacto de tarifas. Y luego la propias dinámicas del mercado español, la economía española está creciendo tres veces por encima de lo que es la media europea, ya lo hizo en 2024 y parece ser que en 2025 pues lo va a seguir haciendo. Con lo cual, en ese sentido somos bastante constructivos con el momento de la economía española y el mercado español en general.

Con la incertidumbre y volatilidad, ¿cómo estáis conformando la cartera de Mutuafondo España, vuestro fondo de bolsa española?

Como gestores activos tiramos al final del libro y el manual. Cada cierto tiempo, y eso es imposible de saber, pero si hay que durante el año tienes siempre al menos una caída importante o relevante, que es un evento de volatilidad, el 2 de abril con el anuncio de las tarifas de la administración Trump, pues el mercado cayó casi un 15% de media y ahora lo ha recuperado todo. Entonces nosotros tirando un poco de manual, lo que hicimos es tener siempre un poco en el radar aquellas compañías, que normalmente son compañías de calidad que no podrías comprarlas a los precios a los que están y aprovechamos para coger posiciones en esas compañías que nos gustaban o incluso en algunas de manera más táctica. 

Hemos comprado compañías como Inditex, que desde máximos ha caído un 25% o incluso Ferrovial, y otras compañías que teníamos ya posición y que nos gustan y que son quizás un poquito más independientes, están fuera de lo que es el radar del mercado como puede ser Almirall o Atalaya Mining. Algunas de esas compañías ya hemos vendido en el rebote, quizás un poquito antes porque el mercado español ha seguido tirando por encima de los niveles de corrección y en principio eso es un poco lo que hemos hecho. 

Lo hemos financiado con aquellas compañías que habrían aguantado más, como algunas eléctricas, otras de corte más cíclico como CAF, que también lo había hecho muy bien en la subida.

¿Creéis que es buen momento para comprar bolsa española?

Sin duda. En España hay un universo de compañías muy amplio y muy rico, lo que pasa es que al final siempre nos centramos un poco en lo que es el índice de referencia. El índice de referencia es un índice muy asimétrico, que al final tiene muy buenas compañías, pero están muy concentradas. 

De hecho, España lleva un 24% en lo que lleva de año de rentabilidad, casi más del doble de media de la bolsa europea y este 70% de la subida sólo lo explican cuatro nombres, cuatro compañías. Entonces, nosotros lo que decimos es que aparte del IBEX hay muchísimas más cosas y en ese sentido nos dedicamos a intentar ver compañías que no están tan en el radar de la gente, que están menos seguidas por los analistas y ahí tenemos nosotros las capacidad para, de alguna manera, intentar crear valor a algo plazo. 

¿Por qué sectores y valores concretos apostáis?

Afortunadamente, en este proceso que hemos tenido de subidas ha habido bastante dislocación sectorial. Ha habido sectores o compañías que lo han hecho muy bien, que han subido bastante y otras que se han quedado atrás, pero que no por haberse quedado atrás quiere decir que tengan o menos potencial o menos atributos a nivel cualitativo. 

Dentro de la parte del sector inmobiliario, por ejemplo, la parte de las SOCIMIS, compañías como Colonial, es una compañía que tiene una calidad de activos impresionante, está cotizando un 40% por debajo de su valor actual de activos y en principio pensamos que el proceso que se inició con la subida de tipos de interés, desde tipos ceros hasta más o menos los que hemos visto a largo plazo, el mercado le ha penalizado bastante al igual que a todo el sector, pero no ha discriminado entre lo bueno y lo malo; y esta compañía, creemos que tiene unos atributos bastante positivos de que cara al largo plazo. 

Lo mismo te podría decir de compañías como Merlin, que es otra SOCIMI, aunque aquí el perfil de la compañía es diferente, ha llegado de los primeros en lo que es el negocio de la construcción de data centers. Creemos que el equipo directivo hace las cosas con bastante rigor y en principio también nos gusta ese tipo de compañías. Y luego, dentro del sector renovable, hay una compañía como Acciona Renovables que también se ha metido dentro de este círculo vicioso de escalada de tipos de interés; y es una compañía que a pesar de que se pueda poner en duda los planes de crecimiento futuros, ahora mismo está cotizando a un 20% de la capacidad instalada que tiene actualmente. Con lo cual, nos parece que es una idea a largo plazo bastante interesante. 

Y luego ya yendo por nombre y apellidos, hablaba antes de esas pequeñas compañías que no sigue tanto la gente y que están fuera del radar de los inversores, te podría hablar de compañías como Tubacex, que es una compañía industrial, que se dedica a hacer tubos para diferentes industrias. Hablamos de compañías como podría ser Almirall, que es una compañía farmacéutica que tiene un pipeline a futuro bastante interesante y que, en este tipo de compañías a nivel fundamental, vemos mucho valor a largo plazo y creemos que el mercado no lo está reconociendo.

¿Cuáles son vuestras perspectivas?

Nosotros al final somos más de mirar los nombres. Muchas veces la cartera que tenemos depende más de los nombres que encontremos que de la propia visión que tengamos del mercado, pero hay que reconocer que quizás el mercado ha subido mucho de manera muy vertical, en algunos casos, o ha recuperado todos los niveles en un escenario que consideramos todavía que puede haber bastante incertidumbre. Con lo cual, no descartamos correcciones a corto plazo, pero nosotros estamos bastante cómodos con la estructura de cartera que tenemos. Primero, porque al final hay historias de compañías que tienen sus propias historias y su propia idiosincrasia, y no dependen tanto de lo que haga el mercado. Y en segundo lugar, porque son compañías de calidad y con mucho potencial y colchón de valoración a medio/largo plazo.