El DOW JONES ha conseguido volverse a poner plano en el acumulado de 2025. Tras unos últimos dos meses tormentosos por los anuncios de aranceles del presidente Donald Trump y la respuesta airada de China, parece que la sangre no llegará al río, o al menos hay una tregua de 90 días. Como resultado, el índice que mide a 30 gigantes de Wall Street ha llegado a superar de nuevo los 42.544,22 puntos a los que cerró el año pasado.
No obstante, se encuentra todavía lejos de los máximos de enero, cuando alcanzó los 44.882,13 puntos de cierre y los 45.054,36 puntos intradiario.
Pero, en el proceso, hay valores que se han quedado muy rezagados frente al índice:
El caso más claro es UnitedHealth, que acumula una caída de nada menos que un 40% en lo que va de año. El gigante de los seguros de salud ha estado en el ojo del huracán en los últimos meses, incluyendo investigaciones gubernamentales, un ciberataque histórico e incluso una avalancha de críticas tras el asesinato de Brian Thompson, CEO de UnitedHealtcare, la división de seguros del grupo. Más recientemente, la compañía decidió suspender sus previsiones para 2025 debido a unos gastos médicos superiores a los previstos y anunció la dimisión de su CEO, Andrew Witty, por motivos personales. Stephen Hemsley lo sustituye en el cargo.
Las acciones de UnitedHealth acumulan una caída de un 52% desde sus máximos de noviembre (630,73 dólares), pero parece que lo peor ha pasado: el rebote desde sus mínimos de apenas el 15 de mayo (248,88 dólares) es de un 22%. De cara al futuro, los analistas dan un potencial alcista a la aseguradora de un 33% hasta un precio objetivo medio situado en 394,8 dólares. Según los datos recopilados por Reuters, la recomendación mayoritaria es de ‘comprar’.
También lo ha pasado muy mal la farmacéutica Merck, con una caída del 22,4% en lo que va de año que es ya de un 42,8% desde los máximos de junio del año pasado (134,63 dólares). Su mínimo lo tocó el 15 de mayo (73,31 dólares), si bien rebota un 5% desde entonces. La compañía recortó hace unas semanas sus pronósticos de ganancias para 2025 hasta un rango de entre 8,82 y 8,97 dólares por acción, citando unos costes adicionales de 200 millones de dólares, en buena parte debido a los aranceles.
Pero los analistas creen que las recientes caídas suponen una buena oportunidad de ‘compra’. Al menos esa es la recomendación mayoritaria que recibe Merck, con un precio objetivo medio que escala hasta los 102,78 dólares. Se traduce en un potencial alcista de un 33,5%.
Una caída del 18,5% acumula en lo que va de año Nike, que generó durante el último trimestre un 15% de sus ingresos en China. La guerra comercial entre EEUU y el gigante asiático pilló al gigante de la ropa deportiva en pleno proceso de reconversión, después de que en octubre del año pasado asumiese el cargo el nuevo CEO, Elliott Hill.
Las acciones de Nike llegaron a caer a un mínimo de 52,28 dólares el 10 de abril, poco después de los primeros anuncios de aranceles, pero desde entonces han rebotado un 14,7%. Eso sí, todavía caen un 38,8% desde sus máximos de junio del año pasado, cuando tocó los 98,04 dólares. Los analistas no esperan que recupere esta cota en el medio plazo, pero el precio objetivo medio que le dan, de 73,14 dólares, supone un potencial alcista de un 19,6%, de acuerdo con los datos de Reuters. La recomendación de consenso es de ‘comprar’.