Bill Ackman replica a Buffett con la versión moderna de Berkshire: sus dos grandes apuestas

Warren Buffett tomó en 1965 el control de Berkshire Hathaway y convirtió la fábrica textil en el holding que es hoy día, con un valor de mercado de 1,10 billones de dólares. Bill Ackman, a través de Howard Hughes Holding, parece querer replicar el éxito del Oráculo de Omaha. Un inversor que consigue batir al S&P 500 y tiene estas dos acciones en cartera. 

El fondo de cobertura de Bill Ackman, Howard Hughes Hld, tenía hasta marzo 1400 millones de dólares invertidos en acciones y, este mismo mes de mayo, Ackman agregó otros 900 millones de dólares. Con esto, el inversor quiere hacer una especie de “Berkshire Moderno” usando a Hughes como vehículo para la compra de participaciones mayoritarias de empresas de calidad. 

Ackman ya es conocido en el mercado por su hedge fund Pershing Square Capital que, en los últimos cinco años, ha superado al S&P 500 por casi 30 puntos porcentuales. El objetivo de Ackman es convertir su fondo de cobertura en un negocio diversificado similar a Berkshire pero, mientras eso llega, el 33% del fondo está invertido en dos acciones: el 19% está en Uber Technologies y el 14% en Alphabet, matriz de Google. Un porcentaje elevado que hace pensar en la convicción que tiene el inversor sobre ellas. 

Uber Technologies  sube más de un 46% en lo que llevamos de ejercicio y la previsión de sus cifras avalan que el precio pueda seguir subiendo. De hecho, la propia compañía espera un EBITDA ajustado que aumentará un 32% en el segundo trimestre y ha pronosticado resultados similares hasta 2026, lo que supone que las ganancias ajustadas deberían aumentar al mismo ritmo, lo que hace que su valoración actual de 16x parezca razonable. 

Pero además, Uber tiene otros muchos argumentos para seguir subiendo.  No sólo es la compañía líder en servicios de movilidad y entrega de alimentos en Estados Unidos, si no que es la plataforma de viajes compartidos más grande en otros nueve países y la más grande de entrega de alimentos en ocho países, lo que le da una escala relevante con importantes ventajas. De hecho, Uber puede realizar promoción cruzada de sus propios productos y se beneficia, tal y como dice The Motley Fool, de un fuerte efecto red, lo que supone que la plataforma se vuelve más valiosa para los consumidores con cada nuevo conductor. 

Esto le permite a Uber tener una enorme cantidad de datos que, usa a su vez, para mejorar continuamente su capacidad para enviar conductores, enrutar viajes y establecer precios. Unos datos que han dado lugar a un negocio publicitario en auge: ayudar a las marcas a orientar las campañas publicitarias de sus usuarios en sus aplicación. 

Además, Uber está en una posición única para ayudar a las empresas de conducción autónoma a llevar robotaxis al mercado. El propio CEO de la compañía, Dara Khosrowshahi dice que la tecnología de conducción autónoma desbloqueará una oportunidad de un billón de dólares solo en los EE. UU., y Uber ya está tomando medidas para capitalizarla.

El consenso del mercado sigue viendo potencial al alza en el valor. Concretamente, según el consenso de Reuters,  Uber podría subir hasta los 95,98 dólares, lo que supondría un potencial al alza de más del 4,4%. De los 53 analistas que cubren actualmente el valor, 43 son compradores de la compañía, haciendo que la recomendación media sea de comprar.  Los indicadores técnicos de la compañía reflejan las subidas que ha tenido el valor en bolsa con una tendencia de medio y largo plazo muy fuerte y donde la operativa que debería regir es la de comprar en soportes o esperar a ruptura de resistencias. 

Desde un punto de vista técnico, José Antonio González, director de análisis técnico en Estrategias de inversión, analiza Uber, un valor "que además de desarrollar estructura de máximos y mínimos crecientes en el muy largo plazo, está logrando superar un área de techos importante en los 87-82,20 dólares por acción, área que funciona como la parte superior de un proceso en rango que lo vemos como una oportunidad para purgar lecturas de extrema sobrecompra en el MACD semanal. De este modo, proyectamos la anchura del último rango y se obtiene un objetivo mínimo en la cota de los 139 dólares por acción, que sugiere un potencial alcista del +53,98% sobre los precios actuales". 

Alphabet es la otra compañía con más presencia en la carta de Ackman. En el año, la tecnológica se ha dejado más de 11,9% aunque, sólo en el último mes, ha recuperado un 12% en bolsa. El mercado espera que las ganancias de la compañía aumenten un 7% anual hasta 2026 y se prevé que los resultados de tecnología publicitaria y servicios en la nube crezcan un 14% anual y el 20% anual, respectivamente, hasta 2030. 

Alphabet está perdiendo cuota de mercado en publicidad digital pero YouTube y Google Search están siendo dos de las propiedades web más atractivas.  Sin duda, el mercado de las búsquedas se está desplazando hacia las herramientas de inteligencia artificial (IA), y competidores como Perplexity y ChatGPT son una amenaza potencial. Pero Alphabet se está apoyando en esa oportunidad con sus propios resúmenes de IA generativa. 

Además, la compañía también está ejecutando la tercera nube pública más grande del mundo en términos de infraestructura y servicios de plataforma. Google Cloud representó un 12% del gasto total de CIPS en el primer trimestre, un 1% más que en el mismo período de un año antes. 

Los analistas ven un potencial de doble dígito para el valor en los próximos 12 meses. Concretamente un potencial del 21,6% hasta cumplir un objetivo de 200,33 dólares. Mayoría de recomendaciones de compra sobre el valor ( 43 con recomendación de comprar frente a 12 que recomiendan mantener) en un valor que, según muestran los indicadores de fuerza, presenta una tendencia de largo plazo débil con el riesgo de que haya una falsa ruptura de resistencias. 

Tal y como explica González, el valor ha conseguido registrar un rebote que desde el punto mínimo al máximo es del 20,51%, rebote muy interesante puesto que "parte de lecturas de sobreventa en el MACD semanal y desde zonas de relevancia técnica, en los 150,80-143 dólares por acción. En este sentido, y gracias a una estructura de máximos y mínimos crecientes, el potencial de medio plazo reside en favor de alcanzar los anteriores máximos de 206,81 dólares, que arroja un potencial del +25,13%. Cierres por debajo de la directriz creciente primaria que parte de los mínimos de marzo de 2020 nos haría pensar en un cambio de sesgo".