José Luis Cava se pregunta si las agencias de calificación crediticia actúan con criterios estrictamente profesionales o intervienen también criterios políticos como “no desagradar al gobierno de turno”. Después de la rebaja en la calificación crediticia de la deuda pública estadounidense por parte de Moody’s, el experto explica que los mercados apenas han reaccionado, algo que puede ser porque ya estuviese descontada la noticia o porque no significa absolutamente nada. 

Sin embargo, se centra en la economía japonesa como representativa de la economía global. “El primer ministro japonés ha dicho que la situación financiera de su gobierno es peor que la de Grecia. El ratio de deuda pública/PIB de Japón, es del 235%, por lo que no van a poder devolver la deuda. Y la mayor parte de estos países sigue el camino de Japón, o el camino que siguió Argentina. Si nos fijamos en este ratio, está peor que Grecia, que tiene un ratio del orden del 142%”.

El primer ministro japonés se queja porque dice que la oposición, a pesar de este elevado ratio de deuda y de que están registrando déficits públicos de forma persistente, les pide que recorten los impuestos. “Los políticos son iguales en todos los sitios, les da igual el déficit público. No van a ser capaces de corregirlo. Este hombre no es que se caracterice por ser especialmente escrupuloso con el ratio deuda pública/PIB. Lo único que dice es que se opone a rebajar los impuestos, nada más. Pero tiene un déficit público enorme. Con lo cual, se ve claramente que esto es una tendencia que no va a frenarse y que los elevados niveles de endeudamiento no se van a corregir”.

Teniendo en cuenta este ratio de deuda pública/PIB, y teniendo en cuenta el déficit público, que la economía japonesa en el primer trimestre del año se ha contraído 0,7 puntos porcentuales, y que su demanda exterior va a reducirse, ¿qué calificación debería tener la deuda pública japonesa? “Las agencias de rating la califican con A+ o A1 estable. ¿No tendría que tener triple B negativa? Yo lo que creo es lo siguiente: es evidente que los gobiernos, para pagar la deuda pública, van a tener que imprimir dinero y van a tener que entregar un dinero devaluado. Si yo eso lo meto en la ecuación, no los puedes valorar con A+, ni A1, ni A de nada. No puede aparecer una A por ahí”.

Si el ratio deuda pública/PIB de Japón está peor que el de Grecia, ¿por qué razón no quiebran? ¿Y por qué no hay una crisis como la que tuvo Grecia en el año 2009? Según el experto, porque los japoneses están comprando bono japonés. “De esa manera, se consigue una gran estabilidad. También compra el banco central. Y hay otro hecho: Japón tiene una gran cantidad de activos frente al exterior, cosa que no sucedía con Grecia. Por lo tanto, es un Estado más solvente”.

El analista indica que el tipo de interés del bono japonés a 10 años está en torno al 1,5%, y la inflación alrededor del 3,5%/3,6%, el tipo de interés real es negativo, del -2%. Un tipo de interés real negativo, ¿a quién favorece? “Vemos que los bancos centrales están acumulando oro por algún motivo, y las grandes instituciones financieras están comprando Bitcoin por algún motivo. Porque saben que la deuda pública se va a devolver imprimiendo dinero y entregando un dinero degradado. Luego, si los tipos de interés reales son negativos y sabemos todo lo anterior, lo lógico es que Bitcoin y oro suban”.

El oro ha llegado a 3.500 y ha corregido, “pero se mantiene por encima de esa recta directriz alcista que le hemos dibujado en gráfico diario”, indica Cava. “Ahora está en una fase correctiva, pero la tendencia alcista de medio/largo plazo sigue intacta. 

En cuanto al Bitcoin, se encuentra ligeramente por debajo de la resistencia de los máximos de enero, en la zona de los 107.500. “Si fuese capaz de superarlo, trazando la proyección de los canales, no me extrañaría que llegara a la zona de los 120.000”.